jueves, 1 de mayo de 2025

CAPÍTULO XV

 Ètienne

El timbre volvió a sonar. Tras la puerta se encontraba Louis, me quedé unos segundos sin saber que decir y reaccioné. — Discúlpame Louis pasa por favor — Él entró dejando su sombrero sobre el perchero, lo abracé cariñosamente pasando mi mano por su espalda hasta dejarla sobre su hombro.

— Ivonne, él es Louis

— Hola Louis, tenía muchas ganas de conocerte. Lestat me ha hablado mucho de tí — ambos se dieron la mano seguido de un par de besos en ambas mejillas — Nada bueno me supongo — dijo Louis mirándome fijamente con una sonrisa en el rostro tratando de apenarme. — Todo cosas buenas — añadió Ivonne. Los tres nos reímos por aquella conversación. — Por favor pasemos a la sala.

Sin duda esta iba a ser una cena inolvidable y aún faltaba por llegar Aleera. Los tres nos sentamos en el acolchado sofá de terciopelo azul celeste. Tuvimos una charla amena en la que Louis habló sobre su largo tiempo en el que no nos habíamos visto. Nos contó que había viajado por muchos países, que le interesaba aprender idiomas. Me resultaba encantador escucharle hablar.

- ¿ Y qué hay de ti Lestat? - Me preguntó a su vez.

- Es muy largo de contar. Louis. He pasado por mucho desde que te fuiste. Hoy es una noche para disfrutar, ya habrá otro momento para ponerte al día de todo. - le contesté apoyando mi mano sobre su brazo - Además aburriríamos a Ivonne que se sabe mi vida mejor que yo después de un siglo juntos.

Mi amiga simuló un bostezo burlándose de mi, dando a entender que mi historia carecía de interés. - pero, ¡qué mala eres! - le reproché marcando sin golpear su hombro con mi puño provocando su cantarina risa – Lo que si te adelanto es que guardo muchas sorpresas – le anuncié a Louis al ver que Carlos discretamente esperaba en la entrada de la estancia.

- ¿Ya está todo listo? - le pregunté.

- Lo estará en media hora. - me informó - Victor y Estrella quieren saber si nosotros vamos a cenar con ustedes o lo hacemos en la cocina como siempre.

- Con nosotros, por supuesto, nos sentaremos todos juntos a la mesa. En cuanto podáis dejar la comida en espera, venid al salón, que tomaremos un vermút primero.

- ¿Tienes humanos viviendo contigo? - me preguntó Louis estupefacto en cuanto el criado abandonó el salón.

- Más o menos – le contesté ambiguamente – en seguida los conocerás.

- ¿Quién es el invitado que falta? - me preguntó Ivonne a traición. Iba a contestarle cuando me di cuenta de su treta. Admiré su astucia - Casi me pillas y arruinas mi sorpresa – pellizqué su talle para provocar cosquillas que esquivó riendo.

El reloj de carillón sonó ocho campanadas. - La verdad es que no se por qué no está aquí ya – empezaba a sentirme ansioso y preocupado sin saber por qué Aleera no llegaba. Me preguntaba si le habría pasado algotemía que no viniera, que ya no quisiera saber de mí. Demasiadas incógnitas pasaban por mi mente apagando mi semblante. Me sentía feliz de ver de nuevo a Louis, pero no podía dejar de preguntarme por Aleera. Decidido a disipar mis dudas me levanté y cogí mi móvil - disculpad que os deje solos un momento. Voy a hacer una llamada.

No hay comentarios: